Me llamo Lucía. Alguna vez me hice llamar Milena. Pero no, me llamo Lucía, tengo 34 años, transité la infertilidad, y con ella vinieron mil problemas más... todavía los padezco... necesito contarlos y compartirlos. Gracias por estar ahí.

sábado, 8 de mayo de 2010

Los primeros meses

Y así estábamos los dos, fascinándonos con París, emocionándonos con Roma, y haciéndonos arrumacos justo en fecha en Venecia. Yo estaba tan convencida de mi deseo de ser mamá que me sorprendía cada día. Porque, como dije, eso no era así, no había sido así nunca, y ahora tan tranquila... Quizás por eso cuando llegó la muy maldita colorada tuve ese primer momento de vacío, de angustia. Pero claro, pasó pronto, porque era el primer intento. Una sonrisa y a seguir buscando, que realmente es algo precioso, ¿no?
Pasaron los meses y seguíamos en la misma situación. Alguna vez había leído que, de las parejas sanas, un 70% quedan embarazadas en el primer semestre, y un 25% al año. Y que sólo un 5% lo conseguía después de haber intentado un año. Quizás porque eso había quedado dando vueltas en mi cabeza, cuando se cumplieron los primeros 6 meses de búsqueda, comencé a angustiarme. Mi "menstruación número 6" vino con los dolores de siempre y algunos nuevos: la duda de si podría o no ser mamá alguna vez. Algo desconocido para mí. Mientras tanto, quizás por la edad, quizás por el momento de la vida, quizás por una combinación de todas esas cosas, mis amigas quedaban embarazadas casi al mismo tiempo, todas ellas sin esperar ni siquiera tres meses, siempre al primer o segundo intento. Yo, "seguía participando".

No hay comentarios:

Publicar un comentario