Cómo fue que me enteré de mi embarazo....

A pesar de tooooodos los problemas que he tenido durante dos años para quedar embarazada, siempre - o casi - fui un relojito con mi ciclo menstrual. Sólo una vez en estos dos años tuve un atraso. Y por supuesto, el evatest marcó un horrible negativo.
En medio de todo el caos que era mi vida en estos días, por todo este lío del riñón y demás, el día martes me di cuenta de que era ese el día que debía indisponerme. No quiero engañar a nadie: mil veces antes había pensado en cuántos días faltaban para el martes, pero esos días que siempre se me hacían eternos, interminables, dolorosos y angustiantes, esta vez se pasaron más rápido debido a las mil y una consultas médicas que tuve que hacer y debido, también, a que el dolor y la angustia tenían otra causa.
Pero llegó el martes y yo era totalmente conciente de que me tenía que indisponer y que no pasaba nada. Miraba mi bombacha cada vez que iba al baño esperando la "mancha voraz". Llegué a decirle al Barba: "qué bueno que no me van a operar estando indispuesta, porque me indispongo una semana antes de la cirugía".
Síntomas: ninguno. ABSOLUTAMENTE NINGUNO. No me dolían ni me duelen las mamas, ni los ovarios, ni nada. No tengo sueño (al contrario, tengo insomnio, porque la cabeza no me para). No tengo hambre. No tengo asco, ni náuseas.
El miércoles se suponía que iba a tener noticias médicas, y entonces el martes a la noche pensé que apenas me despertara haría el test con la primera orina de la mañana. La misma orina que me viene haciendo sufrir tanto.
Tenía el evatest ese que tenés que hacer pis sobre el palito, no en el recipiente. Lo tenía desde hacía meses, o quizás un año, y nunca jamás lo había usado... Ni siquiera me fijé si estaba vencido. Haciendo equilibrio me puse a hacer pis intentando embocar el chorro en el palito.
Terminé. Le puse la tapita. El Barba se estaba yendo. Lo miré. Y vi aparecer una tenue segunda rayita. Lo llamé a los gritos. Temblaba. Le dije "para vos esto es positivo? el único test que hice en mi vida se veía hiper blanco, y este está rosita". Y él me dijo "sí, es positivo". Y nos abrazamos, y lloramos, y yo temblaba, y le decía "va a estar todo bien? no es un bajón que sea ahora? qué va a pasar con mi riñón? tengo miedo!!!" y mil cosas más, mientras me reía, lo abrazaba, y lloraba. El intentó tranquilizarme, se tenía que ir, llegaba tarde. Le pedí que me hiciera el pedido de análisis de sub unidad beta (es médico). Me cambié volando y me fui al laboratorio. Queda a 7 cuadras y de todos modos me tomé un taxi. Le conté al taxista que iba a hacer mi primer test de embarazo, que ya me había dado positivo el casero, etc. Le dejé de propina como 4 pesos de vuelto, porque estaba feliz, le dije que era un día para festejar. Me sacaron sangre, y me dijeron que el resultado estaría para las 18.
Me fui ahí sí, caminando despacito, y pasé por otro laboratorio y pedí otro análisis de sub beta (sí, estoy loca, pero eso demuestra mi incredulidad, años esperando, tanto padecimiento... no podía ser cierto tan fácil!) Y ahí pagué el análisis particular. También estaría para las 18. Yo tenía que trabajar a la tarde. Pasé a buscar uno y otro lo pasó a buscar el Barba. Y los dos dieron casi igual. Mucha felicidad.
Ojalá dure. Ojalá se quede. Ojalá esté bien implantado. Ojalá sea sano.
Ya sé que lo mejor de todo esto es sentir que, a pesar de todo, puedo quedar embarazada. Pero muero de ganas de que este bebé se quede con nosotros.
Gracias por pasar, por estar. Las necesito mucho.